miércoles, 30 de noviembre de 2011

¿POR QUÉ LA DESADAPTACIÓN…? (EPD JAUME FUNES)

La primera EPD oficial, en la cual empezamos a trabajar conceptos, allá por el mes de octubre, lo hicimos de la mano de Jaume Funes, del cual leímos un texto sobre la desadaptación, ese concepto tan repetido en esta asignatura, y del que no nos vamos a poder olvidar tan fácilmente…
El texto plantea una visión sobre la marginación y la exclusión social que a mí me parece magnífica, pues nos habla de distintos factores por los que las personas pueden ver limitada su capacidad de acceso a la sociedad, y que en clase planteó un amplio debate, lo cual me parece muy enriquecedor.
Las siguientes preguntas resumen un poco las ideas que se fueron sacando en clase, y me han invitado a la reflexión sobre el texto y la EPD que tuvimos; y gracias a la que, estoy empezando a comprender muchos términos y muchas cosas de verdadera importancia para mi futuro.
      ¿Cuál es tu impresión general del artículo?, ¿hay alguna información o dato que te haya llamado la atención?, ¿por qué?
Creo que el artículo da una visión muy buena acerca de la desadaptación de las personas, y de los motivos que conducen o pueden conducir a ésta. Al leerlo se me pasaron muchas cosas por la cabeza, creo que es un artículo muy bueno en el sentido de que invita mucho a la reflexión de las personas, pues te hace ir viendo cómo las distintas realidades de exclusión y marginación se pueden ir creando, por qué motivos, etc.; nos muestra cómo en nuestra sociedad las fomentamos y ni siquiera nos damos cuenta…
Por otro lado, el decálogo de intervención que él considera adecuado, me parece algo subjetivo, pues, aunque si bien es cierto que, a la hora de intervenir, no nos podemos saltar los pasos, y jamás debemos dar primero el último paso, este decálogo son los pasos que él considera primordiales. No obstante, me parece fabuloso que lo haga, pues la gente necesitamos leer sobre cómo intervenir, ¿qué sería sino de nosotros?
Lo que más me ha llamado la atención del texto ha sido, sin duda, la afirmación de que algunas soluciones generan más marginación de la que pretenden evitar, pues, aunque a estas alturas del curso, ya hemos tratado este asunto en otras asignaturas, en el momento en que dimos esta EPD era la primera vez que lo oía y nunca me lo había planteado.
Almudena nos mostró el siguiente anuncio, que a mí me sorprendió muchísimo, pues nos pone a la persona enferma de sida como algo muy peligroso, a lo que no podemos ni acercarnos, y con ello, evitaremos que otras personas se contagien, pero marginaremos a los que ya lo están, por tratarlos como diferentes e ´”infectados” por decirlo de algún modo. Creo que debemos plantearnos muy bien nuestra intervención y sus posibles repercusiones.

      ¿Qué factores dificultan la inclusión en la sociedad actual?
Los factores principales que dificultan la inclusión en la sociedad y con ello agravan la situación de marginación, exclusión social, etc, son, según Jaume Funes, al menos cuatro, a saber:
1.      Sociedades inadecuadas à hablamos de la inadecuación de la sociedad a las características del individuo, pero también de la inadecuación del individuo a las características de la sociedad y el sistema cultural. Esto es “la pescadilla que se muerde la cola”, pues siempre estamos valorando qué influye más y qué es necesario cambiar, pero no damos soluciones concretas a los problemas. En mi opinión, no debemos pararnos a valorar tanto qué es lo dificultoso o lo inadecuado, como a intentar adaptar las características de uno y de otro, para que la situación de desadaptación desaparezca o se disminuya.
2.      Construcciones problematizadoras de la realidad à muchas veces vemos la realidad con más problemas de los que ya trae de por sí, y esto nos hace vivir con más inseguridad y menos estabilidad, pues nos alarmamos ante realidades problemáticas que, realmente, no representan tal problema de manera tan dificultosa como nosotros la percibimos. Este factor me recuerda mucho a mí, pues siempre hago un problema gordo de todo, aún cuando son cosas fáciles de resolver y que sé que voy a terminar pronto; esta situación me genera una visión más pesimista de la realidad, y realmente puede acabar afectándote a tu concepción del mundo.
3.      Reacciones incorrectas à muchas veces tomamos la marginación y la exclusión como medidas para la “solución” de un problema surgido. Por ejemplo, podemos hablar de la cárcel, que es un lugar alejado donde se encierran personas conflictivas y dañinas para la sociedad por las acciones que han llevado a cabo en determinados momentos de sus vidas. El encerrarlos es para nosotros la solución al problema de esos individuos, pero yo creo que es una solución de cara a nosotros, que no vamos a volver a tener ese problema cerca, sin embargo, la persona afectada, no ve solucionado su problema, y creo que es ahí donde entraría la intervención, en la solución del problema en el propio individuo. Si alguien entra en la cárcel, por mucho que se rehabilite, cuando salga se va a encontrar con una serie de dificultades añadidas que dan lugar a exclusión social.
4.      Circunstancias problemáticas à hace referencia a la falta de un clima afectivo básico, vivir en condiciones precarias, estar rodeado de estímulos educativos negativos, etc., es decir, engloba todas aquellas circunstancias negativas que rodean a la persona y que le harán ser más propenso a la marginación o exclusión. Sé que muchas personas no están de acuerdo con esta afirmación, pero yo considero que una persona que se crie en unas condiciones negativas (ya sean del medio físico o de relaciones) van a desarrollarse con unas carencias que luego van a transformarse en desadaptación.

      ¿Cuál de ellos crees que es más determinante para que se genere una situación de exclusión social?
Creo que todos son altamente importantes, pues cada uno va a influir en una persona o contexto determinado; si algo he aprendido en este segundo curso es que nunca dos personas que presentan la misma necesidad, van a necesitar una ayuda idéntica, por ello, creo que es importante valorarlos todos.
Quizá el primero, sociedades inadecuadas, pueda ser el principal, pues creo que afecta a un gran número de personas; la relación individuo-medio siempre está presente y es fruto de tensiones y desadaptación entre muchos de los ciudadanos. Pero si me paro a leer los otros tres detenidamente también encuentro multitud de ejemplos de situaciones similares, y también creo que forman parte de una gran parcela de la realidad, por ello no puedo decantarme por uno en concreto.
      Apoyándote en el artículo, construye tu propia definición de desadaptación social.
Para mí, la desadaptación social sería aquella situación en la cual un individuo y su medio no están en consonancia, y por tanto, no se adaptan el uno al otro. La desadaptación de un individuo puede proceder de distintos lugares y modos, atendiendo a su proceso educativo, su socialización, etc. su característica principal es que afecta al pleno desarrollo del individuo.
No sé si la definición se acerca ni siquiera a lo que realmente es la desadaptación social, pero lo que he intentado transmitir en ella, son las conclusiones sobre desadaptación que he obtenido de la lectura del texto y el seguimiento de las clases.
      Plantea un ejemplo en el que las políticas o acciones de integración, generen más marginación de la que intentan evitar.
Para esta pregunta se me viene a la mente un ejemplo muy concreto que hemos estado tratando en otra asignatura, Diversidad Cultural. En ella, hemos tenido recientemente una conferencia sobre la diversidad en las aulas, concretamente, hablamos sobre si debe estar permitido o no que las niñas marroquíes entren a clase con el pañuelo en la cabeza. La conferencia fue extensa, y se tocaron muchos temas, por ejemplo, si la situación es voluntaria u obligada, qué se considera pañuelo y qué no, etc., pero yo me centraré en lo concreto para esta asignatura.
La profesora de diversidad nos dividió en grupos y nos pidió que contásemos qué haríamos si fuésemos el director de una escuela y se nos presentase un caso así. Mi grupo, muy dispuesto, decidió que hablar con los niños de la clase para integrar a la menor entre ellos sería lo más idóneo, así todos comprenderían su realidad y no la marginarían en la escuela; sin embargo, muchos compañeros e incluso la profesora, nos dijeron que con eso había que tener mucho cuidado, pues es posible que los niños no la vean como diferente, no la consideren distinta a ellos hasta ese momento, y cuando nosotros les mostremos estas diferencias, sin maldad ni negatividad, ellos verdaderamente las aprecien y comiencen a ejercer más marginación sobre esa niña.
Esto me recuerda a un anuncio que había hace tiempo en la televisión, que a mí, particularmente me encantaba, y creo que viene mucho al caso, pues el protagonista me recuerda a ese niño de clase que no ha percibido diferencia en su compañero hasta que alguien se la hace ver.

EL TRABAJO EN GRUPO: CENTRO DE PROTECCIÓN DE MENORES

Esta entrada es para contar mis experiencias en cuanto al trabajo grupal-final de la asignatura, pues su desarrollo ha sido bastante interesante y me gustaría compartirlo con vosotros.
Cuando nos dieron a elegir los temas y nos dijeron que los mandásemos, ninguna de las tres teníamos duda de cuál era el tema que queríamos escoger, menores en centros de protección de la infancia. Nos avisaron que todo el mundo querría coger el tema de menores y que no todos lo íbamos a hacer, pero finalmente fuimos nosotras a quienes se les asignó ese tema, quizá porque otros grupos prefieren tratar el tema de la infancia conflictiva, pero no protección de menores.
A mí personalmente es un tema que me toca de cerca, pues mi familia lleva varios años de colaboradora en un centro de protección de menores en Córdoba, donde yo vivo. La labor que desempeñamos no es de acogida, ni mucho menos de adopción, sino simplemente lo que se llama una colaboración familiar, consistente en tener a algún menor del centro durante los fines de semana y periodos vacacionales contigo y tu familia, para que sienta el calor de un hogar y lo que supone una vida en familia, pues, por muy acogedor que sea un centro, jamás será lo mismo que un hogar, allí la gente entra y sale por turnos, los niños viven con más niños de su edad, que van viniendo y yéndose, por lo que no acostumbran a una vida como la de un entorno familiar. Todo esto se hace mientras la situación del menor se aclara, es decir, cuando éste vuelve con su familia, se va en acogida o es adoptado, nuestra labor con él  termina, y comienza otra con otro menor. Por este motivo, deseaba coger este tema, para conocer la realidad más de cerca, pero desde un punto de vista exterior.
Lo primero que hicimos fue acercarnos al centro para que nos proporcionasen toda la información necesaria sobre cómo trabajan, cuál es la metodología que siguen, quiénes lo financian y de quién dependen, etc. Al centro fui yo sola, pues está en Córdoba y ninguna de mis compañeras (Lucía Rodríguez y Julia Aliaño) es de allí.
Cuando llegué estuve hablando con la psicóloga del centro, pues ya la conocía de antemano, ya que siempre es quien nos recibe cuando vamos los viernes a recoger a nuestros niños. Puede parecer extraño que para hacer un trabajo de Educación Social concertara la cita con la psicóloga, pero con ella tenía más confianza y, además, según puedo observar, es quien “corta el bacalao” allí, pues aparte de su función, hace otras, como la de “madre de los niños”, ya que está pendiente 100% de ellos, atiende visitas, etc., creo que es una de las personas que mejor conoce el funcionamiento del centro.
La experiencia fue muy gratificante para mí, porque aún cuando lo que hicimos fue ir viendo en el ordenador toda la documentación que nos podía interesar, y me fue imprimiendo algunas de las cosas que más nos podían servir, a la vez me iba contando muchas cosas sobre el funcionamiento del centro, como por ejemplo, los presupuestos que la Junta les da y a los que se tienen que acomodar para comprar ropa, comida, hacer actividades de ocio, etc. También me fue contando cosas sobre la realidad interna de ese centro, por ejemplo, las plazas reducidas con que cuenta, la separación por edades en las habitaciones, e incluso realidades de los niños cuando llegan, como los síntomas que pueden traer de maltrato, de abandono, etc. y que te conmueven por dentro.
Una vez que hube adquirido la información, me reuní con mi grupo en la Universidad, con el objetivo de comenzar el trabajo que expondríamos un mes más adelante. Cuando vimos todo lo que el trabajo requería, se nos cayó el mundo encima; lo veíamos muy largo, muy complejo y no nos veíamos capaces casi de poder hacerlo. Sin embargo, conforme fue pasando la tarde y fuimos elaborando los puntos que teníamos más claros, todo se iba viendo más fácil. Yo al menos, disfruté mucho leyéndome informes y documentos que aquella psicóloga me había proporcionado y otros que nosotras habíamos encontrado navegando por Internet, pues te cuentan muchas cosas sobre la realidad de tantos menores, que a mí me interesan mucho. Incluso presté mucha atención leyéndome la ley del menor, nunca pensé que podría parecerme interesante una ley…
Aquella tarde dejamos los puntos que teníamos más claros hechos y nuestro siguiente paso fue concretar una tutoría con Almudena, para que nos explicase los puntos restantes, por ejemplo, la acción social o el abordaje histórico, los cuales no sabíamos por donde coger. La tutoría fue, para mí un alivio, pues ella nos explicó qué poner en cada apartado y cuáles suprimir, pues dentro de nuestro colectivo no eran necesarios. Además, me pareció muy curioso que nos diese las gracias por llevarlo tan avanzado, me dio ánimos para seguir.
Con ello, casi teníamos el trabajo terminado, sólo nos quedan los últimos retoques, que haremos durante este puente. Además, este puente nos vamos a centrar en la preparación de la exposición, pues exponemos el lunes justo después, y para ellos tenemos algunas ideas en mente que llevar a cabo (si salen bien les dedicaré otra entrada…)
Para concluir, me gustaría destacar todo lo que he aprendido y estoy aún aprendiendo con este trabajo, pues gracias a su dificultad (que luego no nos pareció tanta), nos ha obligado a ahondar en las cuestiones, a plantearnos muchas cosas y a reflexionar sobre otras muchas. Ahora, mi visión sobre la labor de mis padres y sobre los niños que vienen a mi casa ha cambiado, creo que para bien, y me considero más cerca de ellos. Además he disfrutado mucho elaborando este trabajo y espero hacerlo también durante la exposición, salvando los nervios, pero quiero transmitir a mis compañeros todo lo que para mí supone esta realidad.
Aquí dejo un anuncio que vi ayer por la noche en la tele, y que va en consonancia con nuestro trabajo y con lo que mi familia hace y yo tanto admiro:
                                                         ACOGER ES COMPARTIR...

martes, 22 de noviembre de 2011

UNO Y UNO NO SIEMPRE SON DOS

Desde que el curso comenzó, hace ya bastante tiempo, aunque no lo parezca, en esta asignatura hemos mencionado la palabra desadaptación (o inadaptación, para nosotros es lo mismo) muchas veces y la hemos enmarcado en muchos ámbitos; pero, ¿qué es eso de la desadaptación? ¿Cuándo una persona es desadaptada? Contestar a estas dos simples preguntas no es tan fácil como pueda parecer, pues la desadaptación es algo muy complejo de estudiar e identificar, o al menos así lo veo yo, quizá porque aún estoy empezando.
 Además, la desadaptación de las personas depende también de la sociedad en la que se desarrollen, pues una conducta puede resultar desadaptada en un país y normal y totalmente adaptada en otro.
Por eso, nosotros, para agrupar las diferentes definiciones de desadaptación social y aclarar un poco más todo este caos, hemos hablado en clase de cuatro referentes, los cuales comienzo a explicar:
Referente normativo:
La misma idea de sociedad lleva implícita la existencia de unas normas a las que adecuarse, normas que hemos de conocer mediante el aprendizaje y que harán de nosotros unos buenos ciudadanos, es decir, ciudadanos adaptados a nuestra sociedad. Estas normas van a marcar el buen funcionamiento de la misma, o eso pretenden al menos.
La desadaptación vendría cuando una persona no se adecua a esas normas sociales, y lleva un modo de vida alternativo a ellas. Pero a mí, llegados a este punto me surge alguna duda; aunque creamos que esa norma social es incorrecta, dañina, inmoral o cualquier otra connotación negativa hemos de cumplirla sólo por no ser unos desadaptados, ¿qué pasa con nuestra capacidad de decidir qué es bueno o malo para nosotros? Creo que elegir que es bueno o malo es muy subjetivo, y no todo el mundo lo va a ver del mismo modo, y creo que por ello existen estas normas, pero tampoco la persona que elabora las normas es perfecta, ¿cómo podemos saber si adaptarnos a una norma que consideramos negativa o “revelarnos” contra ella siendo así una persona desadaptada de su sociedad?
Además, en relación a este referente opino que por no cumplir una, dentro de la infinidad de normas escritas y no escritas con que cuenta una sociedad, no te conviertes automáticamente en una persona desadaptada que necesita intervención.
Por ello creo que, desde mi punto de vista particular, este referente no define con claridad y exactitud lo que es una persona desadaptada en una sociedad.
Referente aptitudinal:
Son factores aptitudinales los que dificultan la adaptación social, es decir, la adaptación o desadaptación de una persona a su medio va a venir condicionada por sus aptitudes, por sus características y capacidades personales.
La definición de este referente, en mi opinión, deja bastante que desear, pues habla lo mismo de sujetos con déficit de salud o de inteligencia que de sujetos con trastornos de afectividad, carácter o comportamiento; para este referente todos ellos, sino son capaces de adaptarse al medio sin ayuda particular son desadaptados.
Creo que la desadaptación debe ser algo más concreto, pues no todo el que esté enfermo o vaya en una silla de ruedas está desadaptado en la sociedad. Entonces, ¿la persona que se ayuda de unas gafas para poder ver mejor es una persona desadaptada?
Además, según este referente la desadaptación ya no depende únicamente de la persona, pues también influye mucho la medida en que el terreno donde se desenvuelve le sea hostil.
Referente cultural:
Para hablar de este referente hemos de hablar de cultura mayoritaria vs culturas minoritarias. Según este referente, la desadaptación es producto de un conflicto entre la cultura mayoritaria y las subculturas de una sociedad; pero entonces, para que no haya conflicto, y con ello, no haya desadaptación, ¿todo el mundo debería participar de todas las subculturas de su sociedad para no ser desadaptado en ella? En mi opinión no es así…
Almudena nos puso en clase el ejemplo de Sevilla, que me hizo entender este referente de manera más clara. Si a una persona que vive en Sevilla no le gusta la semana santa o la feria de abril, ¿debe sentirse desadaptado? ¿Esa persona durante todo el año acaso no está adaptada a su sociedad? Creo que es más complejo de lo que parece.
Otra idea que saco de este referente es el hecho de que el comportamiento desadaptado se aprende en contacto con personas desadaptadas; esto lo he leído en uno de los textos de lectura obligatoria y la verdad es que me ha hecho pensar mucho, porque, si un grupo de personas que consideramos desadaptadas en la sociedad, conviven y se desarrollan bajo unos patrones propios (diferentes a los de la sociedad en la que se insertan, claro está), pero en los que todo están de acuerdo y crean su propia subcultura ¿realmente están desadaptados, o viven adaptados a otro modo de vida? Y con esto volvemos al principio de este referente, el conflicto entre la cultura mayoritaria  y las subculturas.
Referente interactivo
Es el último de los cuatro, y con el que cerraré esta nueva entrada de mi blog. En él se enmarcan diversas teorías acerca de la desadaptación, recogiendo todo lo de los referentes anteriores, pero de manera distinta.
El referente interactivo no trata de enmarcar a todos los individuos con unas determinadas características bajo las etiquetas de adaptados o desadaptados; su objeto no es la característica en sí, sino el cómo la persona es capaz de adaptarse a esta característica. Pero entonces surge una duda, ¿el problema es del medio o del individuo? Según yo pude entender no es ni de uno ni de otro, siendo de ambos a la vez, es decir, la persona tendrá unas características más o menos favorables, a la vez que el medio será más o menos hostil. Por lo que es importante la actitud que la persona tenga frente a este medio y frente a sus características, así se enfrentará de un modo u otro a la situación; pero lo verdaderamente importante, y que nos hace comprender este referente es la relación que exista entre una cosa y la otra, entre el medio y las características particulares de la persona.
Entonces, la conclusión final de este referente, y de esta entrada de blog, pues considero que este referente es el más válido, (bajo mi punto de vista es el que más se acerca a la realidad), es que cada situación es diferente, nunca una misma característica enfrentada a una misma condición de medio hostil va a desembocar en una misma situación, pues la desadaptación o no de la persona depende de muchos otros factores y se va a dar cuando haya una ruptura de comunicación entre ambas cosas, pero no siempre tiene por qué darse, y es que, UNO Y UNO NO SIEMPRE SON DOS…