martes, 11 de octubre de 2011

Y ES QUE, QUERIDO AMIGO, LA VIDA ES ASÍ

Sí, la vida es así, unas veces estás arriba y otras veces estás abajo. Con esto hago referencia al corto de Pixar que vimos en la primera clase oficial con Almudena, pero que a la vez, me recuerda tanto a mí…
En el vídeo aparecía un pequeño cordero que bailaba, saltaba, disfrutaba de su vida al instante, al máximo… parecía el cordero más feliz del mundo. Sin embargo, un determinado día lo cogieron y le quitaron toda la lana de su cuerpo. A partir de entonces, parecía que el mundo se le venía encima, ya no quería bailar, ni saltar, ni disfrutar, parecía como si para él todo hubiese terminado.
Esta es la primera visión que yo tengo del vídeo, quizá suene un poco extremista, pero creo que lo veo así porque me siento muy identificada. Yo siempre estoy alegre, contenta, y parezco ser la persona más feliz del mundo cuando todo está tal como yo lo quiero, pero si algo, una mínima cosa, se tuerce, todo se me vuelve gris, todo deja de ser lo bonito que había sido hasta ese momento, y TODO se convierte negativo.
Gracias a Dios, creo que, en realidad, este sentimiento me recuerda más a mi pasado que a mi presente, porque con el paso del tiempo estoy aprendiendo a separar lo bueno de lo malo, a no dejarme influir tan rápida y tan íntimamente, a pensar que todo tiene una solución y a no ahogarme en un vaso de agua. Y este cambio es, en parte, gracias a esta carrera, que me está haciendo ver el lado positivo de las cosas, que me hace ver la suerte que tengo, y cómo otras personas realmente viven una situación que nadie desearía. Además, me está ayudando a no ser tan egoísta con los demás, pues pensar que siempre nos ocurren cosas malas o que ¡qué mala suerte tenemos! es ser egoísta con las personas que verdaderamente no tienen nada, tienen mala suerte, o viven mucho peor que nosotros.
Por otro lado, el vídeo me proporciona otra visión, haciendo referencia a la segunda parte de éste, cuando aparece el conejílope para ayudar al cordero. Nada más ver esa escena también me sentí muy identificada, esta vez con mi futuro, pues nosotros educadores y trabajadores sociales debemos ser esa ayuda, ese conejílope, como Almudena lo llamaba, que acude donde se le necesita y que hace de la oscuridad una luz, una luz para seguir adelante, para mostrar, por ejemplo en este caso, que las apariencias no importan, que nuestro interior es lo verdaderamente importante, que lo que los demás piensen tiene una importancia relativa y que la imagen que los demás tienen de nosotros depende precisamente de nosotros mismos, de cómo nos mostremos ante éstos.
Por eso, es muy importante, o al menos así lo veo yo, estar a gusto consigo mismo, pues sólo de esa manera podrás estar a gusto con los demás.
Por eso, cuando estés arriba de la vida, disfruta y hazlo siempre con los demás; y cuando estés abajo relájate, pues la vida es una rueda y volverás a estar encima de ella, en ese momento sólo tienes que pensar positivamente, pues medio vaso de agua, un vaso medio lleno, puede aliviar la sed.

lunes, 10 de octubre de 2011

PRIMERAS IMPRESIONES

¿Cómo empezar? ¿Qué decir? ¿Estará bien?... Estas son todas las preguntas que me vienen a la cabeza cuando pienso en hacer la primera entrada de mi blog, un blog que me acompañará, sin duda, durante todo un cuatrimestre, que me hará comerme la cabeza más de una, y de dos, y de tres veces, pero que, por otro lado, será mi momento, el momento de expresar lo que siento, lo que pasa por mi mente, etc. Y aquí van mis primera impresiones…
Cuando llegué el primer día de clase, sin ganas, todo hay que decirlo, lo hice, como diría una gran amiga mía: “de bajona”, esto es, pensando en que, después de uno de los mejores veranos de mi vida, volvía a tener que irme a Sevilla, volver a madrugar, volver a coger trenes de regreso a casa tooodas las semanas y así, un largo etc. Para colmo de los colmos empezamos un lunes, y lo primero que nos dicen es:” Tenéis que haceros un blog para llevar esta asignatura, sobre él se os calificará…” Y mi cara se descomponía por momentos… Para mí todo se convertía en un caos; con lo mal que las tecnologías y yo nos llevamos… con lo fácil que es escribir a mano y entregar los folios… pero todo eso ya es cosa del pasado…
Y pasó una semana, y otra, y mi cabeza seguía echa un lío, seguía sin entender el funcionamiento del blog, y si soy sincera, aún no tengo muy claro cómo va esto…

Sin embargo llegó la tercera semana, que comenzó con la práctica que Almudena tenía que darnos, y en ese momento empecé a ver las cosas claras; un trabajo escrito (eso ya va más conmigo…), y una explicación de Jose sobre QUÉ HACER con el blog… Mi mente iba recolocando sus ideas, y la de realizar este blog no me parecía tan descabellada; aunque cuando me he sentado a escribir estas palabras, me ha costado un poco, pues tenía las ideas, pero no sabía cómo colocarlas ni realmente cómo expresar todo lo que quería decir…
Más o menos esto es lo que me transmitieron las dos primeras semanas de clase, en las que parecía que todo el mundo se me venía encima con todas las asignaturas, todos los trabajos que nos mandaron desde primera hora, etc., pero que han dejado paso a un tiempo de aclaración, de serenidad o tranquilidad, en el que todo empieza a tener la luz que necesitaba…
Sólo queda esperar que la asignatura vaya desarrollándose con alegría, por las tres partes y, que cuando dentro de un tiempo leamos esto volviendo la vista atrás, porque todo ya haya terminado, lo que veamos sea un comienzo que pareció ser duro, pero que dio lugar a cuatro meses intensos, aprovechables y aprovechados y que nos hayan hecho aprender algo más sobre esta gratificante profesión.
Hasta la próxima, Marta